lunes, 13 de junio de 2011

"EL FASCISTA"


Es un día común y corriente para mi, despierto con el hartazgo de tener una jirafa ninfómana (es lo que me dijeron que era cuando mi mujer me pide sexo después de tres meses de inacción) En mi cuarto, reclamándome el porque ya no se me para. ¡Por Dios! ¡Si soy el jefe del estado mexicano! Que me va a pedir ella que yo no le haya dado: Poder, ambición, dinero, omnipresencia; y me pide algo tan inverosímil como satisfacción sexual. que esta penado (para las mujeres) por el PAN. ¿Que más le da seguir mi juego? (de sexo no vive el hombre.... digo la mujer) un juego napoleónico; pero sin aras de bienestar. Yo soy feliz, aunque me critiquen en Stanford, en Ciudad Juárez, en Mérida, en Michoacan (vaya se entiende... En todos lados) Yo ya estoy embelesado en trajes y luces por mi amigo el Norteamericano. Que me importa que ustedes me odien; ustedes basura del estúpido Sistema Educativo Nacional (de mi gran amiga Elba Esther), ustedes estúpidos votantes que no me dieron la mayoría (y que aun me duele). ¿Qué mas me da vender mi estado al mejor postor? ¿Qué mas da escribir estas lineas en etílico estado? ¿Qué más da lo que ustedes piensen, aborregados? Si soy lo que soy gracias a su conformismo, a su idiotización provocada por la televisión, soy el gran FÁCTICO, soy el Dios de los que me siguen con fervor, y de los que no me siguen SOY ALGUIEN, al menos el destructor de sus ideales pasados de moda, ¿Qué más importa si mañana hace un no se que de años que nació el Che Guevara? Si el negó el poder para seguir siendo un Don Nadie... Y morir como un Don Nadie... Yo estaré en los libros de texto, con mis brillantes lentes, (y mi brillante pelona) y mi brillante ¿Sapiencia? Sabiendo que fui el precursor del abolismo del Narcotráfico que no beneficia al poder, el benefactor de grupos de poder que no benefician a la nación, el ultimo letargo de la sabiduría FASCISTA, que no es mas que a lo que le debo el poder otorgado; soy un fruto de la escuela de derecho mas facciosa del país, soy mas que un nadapensante porque obedezco las intenciones de los poderosos, no me juzguen mexicanos (o mexinacos, como gusten) si USTEDES estuvieran en el poder, ¿Qué harían? Me dejo llevar como el viento, y, creo que ya lo saben, por si no, se los recuerdo: ¡ME VALEN MADRES!

Con cariño:

El Faccioso. Felipe Calderón Vino-josa.

P.D. A chupar y a pistear que el mundo se va a acabar (Y México antes, so.... you know what to do)

"El fascista"

jueves, 9 de septiembre de 2010

Neoliberalismo desde el punto de vista Marxista


Como el mes de septiembre es un mes de "festejos" y "celebración" (ajá) por el Bicentenario de Nuestra ¿Independencia? pues festejemos con una reflexión de Adriana Flores sobre el neoliberalismo y su repercusión en la sociedad.


Tal vez en los próximos días haga una entrega especial respecto del mes lleno de felicidad, armonia, festejo, seguridad etcétera... que corre. Con la advertencia de siempre. No me crean.




ENSAYO SOBRE LAS INSTITUCIONES FINANCIERAS DESDE EL PUNTO DE VISTA MARXISTA.

La doctrina de Marx introduce una distinción en la Economía en comparación con las teorías económicas de Adam Smith y David Ricardo; pone énfasis en el trabajo y no trata como ellos al trabajo mismo como una mercancía, pues este es el productor de todos los demás valores.
La preponderancia de la fuerza del trabajo por encima de la producción en el pensamiento marxista se da porque los capitalistas lo ven como un valor asignado al producto final. Y no el costo de producir esa fuerza de trabajo, o sea, de producir al propio obrero viviente, de asumir el costo social de asignarle al obrero el verdadero valor de su fuerza laboral. Marx abre la crítica al capitalismo por no dar ese enfoque social que radica en el estado de bienestar y que la fuerza de trabajo obtuviera al igual que los dueños de los medios de producción un beneficio amplio mas allá de solo cubrir sus necesidades básicas de sobrevivencia mediante la asignación de un salario.
La abolición de la Superestructura tiene que ver con las instituciones financieras. Dentro del pensamiento marxista estas instituciones no solo deben estar controladas por el estado, sino que deben pertenecer al estado como un ente controlador de la riqueza para su correcta repartición, y para el otorgamiento de créditos para mejorar la calidad de vida de sus gobernados. En sentido contrario el Capitalismo aísla y nulifica la acción del Estado dentro de las Instituciones Financieras. Dejándolo solo como un ente regulador que es controlado y sometido por los mismos dueños del poder económico. Así, a pesar de que haya en nuestro país instituciones creadas a partir de la corriente socialista; paraestatales como Petróleos Mexicanos, CFE, y bancos controlados por el estado como el Banco de México y Banjercito, entre otros. Estos últimos solo se limitan a controlar acciones específicas como la expedición de moneda y el control de gasto corriente así como el pago, crédito y ahorro de los efectivos militares del país. Mientras que los bancos de Capital Privado son aquellos que verdaderamente controlan y crean las condiciones de libre mercado que benefician a ellos mismos y que reducen de manera significante el poder adquisitivo de los trabajadores.
La función de los bancos es la de contactar a personas que tienen y quiere ahorrar con aquellas que necesitas créditos; Las instituciones financieras ofrecen a los ahorrantes una ganancia extra a cambio de recibir sus ahorros, también le cobran a personas a las que dan créditos, esto se conoce como tasa de interés. Debe haber una diferencia importante entre un margen y otro porque esto es la principal fuente de ingreso de las entidades financieras monetarias. En el Estado Mexicano tenemos tasas de interés altísimas que con un descuido se vuelven impagables; la ambición de los bancos combinada con una normatividad nula o incumplida hace que los abusos del neoliberalismo permeen en aquellos ciudadanos mexicanos con menores ingresos disminuyendo su nivel de vida y generando pobreza y endeudamiento.
La recesión de 2009 en Estados Unidos que afecto a la mayoría de los países del mundo; incluyendo de manera significativa a México fue provocada por el libre mercado y por las instituciones financieras del neoliberalismo. Se sobrevalorizaron los productos, hubo crisis hipotecaria y crediticia, provocando una inflación y una crisis alimentaria mundial. Los bancos crearon una expansión de crédito que al final era solo ficticia, pues no se recupero jamás ese recurso, haciendo que los inversionistas perdieran el poder de sus acciones y varios bancos y empresas internacionales, aparentemente con números sanos quebraran de la noche a la mañana. El gobierno norteamericano realizó una acción basada en la filosofía marxista: Inyectó capital en los bancos para su recuperación. Pero estas instituciones bancarias siguen en poder de la superestructura y se apoyaron (convenientemente) en el Gobierno de Estados Unidos para su recuperación. Tomando dinero que proviene de los ciudadanos para recuperar su poder económico so pretexto del rescate de la economía nacional, sin arriesgar nada suyo y si, el dinero ajeno. Convirtiendo así una teoría socialista de control de los bancos por medio del estado, una vez mas en solo un instrumento más para proteger los intereses de los dueños del capital financiero.
Finalizado el análisis de las instituciones financieras del capitalismo desde el punto de vista Marxista, se abre más ante mi el panorama de la situación financiera del sistema dominante en la actualidad: El Neoliberalismo, y comprendiendo, que en el tenor del abuso y la codicia que tienen los grandes capitalistas, podrían, en un futuro no muy lejano realizarse un harakiri infame, pues destruirían un sistema económico que ha regido al mundo entero desde hace casi doscientos años. No sin antes, imagino, estos grandes capitalistas (que forman parte de la superestructura) buscarán su no afectación en patrimonio, medios de producción y bienes, dejándole si una cuenta muy alta a la sociedad y a los ciudadanos comunes que pertenecemos a la estructura.


ADRIANA FLORES LIRA.

jueves, 15 de julio de 2010

No represanta a los jovenes




El argumento barato de la ex candidata panista al gobierno del estado de Tlaxcala al afirmar; que ganó el de las trampas, el dinosaurio, el creador de toda la maldad que hay sobre la tierra, el mismísimo diablo con bigotes, aparte de absurda es contraproducente. Ella misma ha sido quien a las viejas usanzas priistas fue designada por dedazo por el máximo (eso dice él) líder del país.


Sin trayectoria política seria y apostándole a una campaña centrada en el "pobrecita de mi" ¡pero véanme! A donde he llegado. Y llego hasta donde pudo pues no dio el ancho.


Muchos de ustedes sabrán (y los que no les cuento en corto) que por obligación acudí a muchos mítines de la otrora candidata Adriana Dávila Fernández. Admito que en ningún momento pensé darle mi voto. A pesar de todo me concentré en no prejuzgar y a lo largo de dos meses me dediqué a escucharla. Llegué a una amarga conclusión que tal vez muchos jóvenes no visualizaron: La señora Adriana Dávila Fernández no representa a los jóvenes, como lo habrá dicho en numerosísimas ocasiones durante su campaña. Para mi como joven, es una vergüenza absoluta que una señora sin meritos propios ni carrera política, (ahora mucho menos esperemos que haya sido una luchadora social como se autodenominaba) sea la candidata a gobernar un estado tan necesitado de soluciones como lo es Tlaxcala. Me da vergüenza además de ella que otros candidatos jóvenes a puestos de elección popular se autodenominaran o su sequito de achichincles los elevaran a representantes de la "Nueva generación" La que no es partidaria de las viejas herramientas de la política, la que hace las cosas bien, la que se moderniza y abre sus cuentas en las redes sociales en internet generando un sin fin de amigos (inventados o no), la que se dice que ya le toca gobernar y un sin fin de barbaridades mediáticas y meramente apantalla pendejos. Quiero decirles a ustedes: Adriana Dávila, Orlando Santacruz, Gregorio Cervantes, Alfonso Maldonado, Ángelo, etcétera, que me niego rotundamente a que digan que nos representan, que ustedes son jóvenes políticos que reivindicaran a nuestra generación. ¿Cuál reivindicación me pregunto? ¿Qué realmente estamos tirados al caño? ¿Acaso somos una bola de tarados que se la pasan en el internet y que no viven sin sus celulares o sus gadgets tecnológicos? Que se creen ustedes para representarnos. Si son la cara del nepotismo, del compadrazgo, del "aiga sido como aiga sido" del "le hago sus negocitos al Gober y me lavo las manos" y luego me vuelvo títere-diputado de éste para que después ya tenga mi feudo apizaquense. O convertirse en el amo y señor de los dineros del municipio y aprovechándome de que mi patrón es un vil viejo ratero (además de ignorante, corrupto y cínico) y retiro una lanota del erario; me la quedo y falsifico firmas, eso pues con el loable fin de financiar mi campaña y construirle un aula mas a la modesta universidad de mi papi. Quiero desde esta trinchera lanzarles un reclamo desesperado y espetarles en la cara lo siguiente: Jamás se cuelguen de la verdadera juventud trabajadora, creadora, innovadora y de alguno que otro político joven con vocación de servicio verdadera. Dejen de usarnos con fines políticos. Ustedes no nos representan y me da pena que la gente los vea en los puestos populares y diga: Mira ese chamaco (a) prepotente, ladrón, payaso. La política no es para ellos. Ustedes, más que los adultos les están quitando la oportunidad a jóvenes dispuestos a servir a su patria.


Aclaración: Por motivos de carga laboral y algunos pendientes no había podido postear este material que escribí hace un par de semanas. Sin embargo consideró necesario publicarlas pues después de las elecciones siento que el texto es aun vigente. Algunos de los políticos que nombré ganaron puestos de elección popular y en serio. Ojala... Ojala me equivoque y sean dignos representantes del pueblo y de los jóvenes. Esta por verse.

jueves, 10 de junio de 2010

CONFESIONES DE UN SICARIO ECONOMICO

John Perkins (1945) es un economista autor y activista estadounidense. Su libro más conocido es "Confessions of an economic hit man" (Confesiones de un sicario económico), en que denuncia la explotación y neo-colonización de países del tercer mundo por la corporatocracia (conformada por corporaciones internacionales, bancos y el propio gobierno de los Estados Unidos).
Este libro estuvo en la lista de los libros más vendidos del New York Times durante siete semanas.
John Perkins, fue un empleado de agencias del servicio de Inteligencia del gobierno de los Estados Unidos relacionadas a la CIA. Y en este documental relata la forma de accionar del gobierno de EUA el Banco Mundial y las Corporaciones multinacionales para apoderarse de la economia de un país; una teoria nada descabellada que nos hace reflexionar sobre realmente que poder real hacia nuestros gobiernos tenemos los ciudadanos comunes y la manipulación que sufrimos a manos de nuestros propios representantes.

PARTE 1
PARTE 2

sábado, 8 de mayo de 2010

La excepción y la regla.

Aqui les dejo una excelente columna de Carlos Fazio de la Jornada recomendada por mi compatriota tlaxcalteca @RadioIxtlan http://www.caminoaixtlan.com.mx/ y que me gustaria que leyeran, tal y como se publica:

Cuando Vicente Fox entregó de manera furtiva a Calderón ese poder del que tanto abusara, no quedaba duda de que, como secuela de la fraudulenta coyuntura que lo instaló en Los Pinos, el sucesor espurio persistiría en la imagen tiesa y recalcitrante, porfiada y admonitoria de su antecesor, y que profundizaría el carácter ultraconservador y la mano dura de un régimen ramplón apoyado por el gran capital y los poderes fácticos.


Desde el primer segundo de su investidura por un militar del Estado Mayor Presidencial, en lo que configuró a todas luces un virtual golpe de Estado técnico, Calderón se refugió en las fuerzas armadas para buscar legitimidad y las involucró en una guerra sin estrategia aparente, contra un enemigo funcional y difuso que estaba incrustrado hacía un cuarto de siglo en los pliegues de un Estado de tipo delincuencial y mafioso. Como consecuencia, el país se militarizó, y a últimas fechas ha ido incursionando en variadas formas de paramilitarización, guerra sucia y terrorismo mediático.


En ese contexto, en forma paulatina se fueron vislumbrando tres de los factores que Nicos Poulantzas detectó como síntomas indicativos de todo proceso de fascistización: la radicalización de los partidos burgueses hacia formas de Estado de excepción; una distorsión característica entre poder formal y poder real, y, por último, la ruptura del vínculo representante-representados (Fascismo y dictadura, Siglo XXI, Buenos Aires, 1975, págs. 75 y 76).


En el primero de esos rubros, cabe señalar que el proceso mexicano, aunque acelerado, ha ido cumpliendo diversas etapas de desarrollo. No se adoptaron, ni se adoptan aún, de modo directo, disposiciones inherentes a un régimen de excepción, sino que más bien se eligieron normas excepcionales, más o menos previstas por el texto constitucional o sujetas a “interpretaciones”, tratando en primer término de convertirlas en aceptada rutina, para luego propugnar leyes que las incorporasen en forma permanente al aparato represivo del Estado. Verbigracia, las contrarreformas calderonistas en materia laboral, de seguridad nacional e interior (incluido el fuero castrense), y la ley federal de telecomunicaciones y contenidos audiovisuales. De modo que, en síntesis, el proceso fue éste. Primero: introducir de facto la excepción. Segundo: convertirla en rutina. Tercero: transformarla en regla.


El segundo índice, la distorsión característica entre poder formal y poder real, apareció en algunos enfrentamientos vinculados con grupos monopólicos (con Carlos Slim, en particular) y otros en materia de seguridad que involucraron a sectores de poder, como el caso Martí y, más recientemente, el asesinato por el Ejército de dos estudiantes del Tecnológico de Monterrey. En cuanto al tercer ítem (ruptura del vínculo representantes-representados), a la larga zaga heredada de sus antecesores neoliberales, puede resultar ejemplarizante el manejo de la recesión económica y de la crisis de la influenza A/H1N1, así como el decreto de extinción de Luz y Fuerza del Centro.


Tal vez donde pueda reconocerse una diferencia neta entre las formas de los fascismos europeos clásicos y ésta de aquí, tan peculiar y pedestre, sea en aquel rasgo que Gramsci denominaba “equilibrio catastrófico”, ya que el signo clave del México actual es más bien un catastrófico desequilibrio. Es sabido que todo régimen de excepción se origina en una crisis política o en una crisis ideológica, o en ambas a la vez. Pues bien: aun desde su muy reaccionario punto de vista, ¿qué soluciones o atisbos de soluciones ha aportado el mandamás de turno a tales crisis? El saldo exhibe la coherencia de Calderón con su condición de clase: monólogos autoritarios, agresivos desplantes provocadores, siembra de miedos y odios, cacería de brujas, actitudes antiobreras, embestidas antipopulares de corte castrense y un largo etcétera, combinado todo eso con una total sumisión a Washington. Es decir, su extremado rigor hacia dentro se transforma hacia fuera en bochornosa obsecuencia convenenciera.


Desde un principio, Calderón ha intentado transformar el miedo en una modalidad de control social. Convirtió el estado de derecho en estado de desecho. Directa o indirectamente, su régimen ha propiciado el terror y no ha vacilado en usarlo (incluso contra jóvenes considerados “desechables” y niños que son asesinados en retenes castrenses, y luego refuncionalizados, con fines de propaganda exculpadora, como “daños colaterales”) como elemento de presión constante y dura persuasión. Problemas de “percepción”, diría el señor Presidente. Asimismo, de la mano de un fascismo furtivo reaparecieron la tortura sistemática, las ejecuciones sumarias extrajudiciales, las desapariciones forzosas, los allanamientos sin orden judicial. A ello se suman la punitiva obsesión normativa de Calderón en desmedro de las libertadas ciudadanas y el estruendo de una “guerra” que sirve para encubrir el desastre económico y social.


Visto así, en el marco de la ley sobre la “afectación de la seguridad interior”, que busca legalizar la presencia de los militares en las calles y el uso de la “violencia buena” sin que tengan que sujetarse a tribunales penales civiles en caso de violaciones a los derechos humanos, la alternativa, de conseguir finalmente ese adefesio aval parlamentario, es cada vez más clara: o coincidimos ideológicamente con el régimen (lo que significa coincidir con la clase dominante que él representa y, por tanto, admitir que nos domine) o incurriremos en ese novísimo estado de peligrosidad o “afectación”, según la última palabra en materia de aberraciones jurídicas. Por ese camino, a poco de andar, sólo tendremos derecho a los monólogos del señor Presidente. Pero a diferencia del otro monologuista famoso, el príncipe de Dinamarca, Calderón no nos pondrá ante el dilema de ser o no ser. Sencillamente nos ordenará no ser. Porque, como se sabe, el ser ha significado, en todas las épocas, un estado de peligrosidad.

martes, 23 de marzo de 2010

Con ojos de loco

Sin razón alguna, hoy prefiero la calle sucia
acabar con la ternura de los cuentitos
con el día vivir y con la noche dormir la siesta
porque lo que amamos es lo que sufrimos

Deformado el ser me ve con ojos de locura
yo ataco y entre gritos mi verborrea veo
enferma esta mi sien; pesa, cae en la sombra
maldije a la vida, al viento, a mi latir, ¡Golpeo!

Con estos logros nuevos, tu sombra llega como hiel
arranca mis ojos me los enseña y se va temerosa
pero regresa sigilosa y me quema la piel

Detente osada maldad, detente, hoy duele
hoy no juegues, estoy cansado, exhausto
¡Vete amiga muerte! ¡Váyase usted! Vuele